Atentamente, hemos visto como los contrarios al PP, han contribuido a realizar un teatrillo personificando la hipocresía política desde la primera votación de la investidura de Rajoy (resultado 170-SI – 180-NO). En vez de terminar con la agonía «bloqueadora» los grupos de izquierda han querido retener su protagonismo a base de actuaciones peliculeras.
Rajoy ha tenido en todo momento un discurso conciliador y coherente, ha estado a la altura de la situación, adapaptándose al cubo de Rubik en el que se encontraba, desde luego, sus réplicas se han ceñido al sentido común y al interés general.
Javier Hernando ha hecho algo que se llama vulgarmente «envainársela», desde luego es mejor eso, antes que destruir una nación de las más antiguas del planeta y que a más de uno se le olvida, que España fue un imperio mundial, en su día.
Pedro Sánchez demostró, una actitud pasiva, Javier Hernando ha intentado limpiar la suciedad que ha dejado su compañero de partido, pero aun así, el ex secretario del PSOE no ha tenido la decencia de aplaudir/animar a su grupo parlamentario socialista dentro del hemiciclo.
Podemos se adentró en la actitud faltona con las ironías de su líder, es curioso, pero el secretario general no se está dando cuenta, de que su actitud solo le está restando votos dentro de su electorado y también impactando negativamente en los ciudadanos indecisos.
El diputado Pablo Iglesias, pidió el turno de réplica, por la acusación de Rafael Hernando de ponerse a los pies de los dictadores de otros regímenes instaurados en otros países, con tildes comunistas, por ello, la presidenta del Congreso, Ana Pastor, le negó la réplica, por lo que, el grupo de Podemos ha reaccionado con un berrinche que no deja de ser otro movimiento estratégico para acaparar los medios de comunicación.

Los problemas de poco sabor político, por parte de los grupos nacionalistas catalanes, dejan cada vez una luz más débil, sin embargo, se ha encendido una nueva bombilla en Cataluña, llamada movimiento Lliures, que aspira a ser un nuevo partido político que parte con la máxima de ser pro España y por ende, sustituya a toda la actual fallida política independentista catalana.
El guiño de Coalición Canaria, es gustosamente recibido por la coherencia, puesto que las palabras sensatas de sus miembros, son ejemplo de equilibro, certidumbre y sensatez dentro del caos político.
Ciudadanos ha estado poco contundente, conciliador, ¡sí!, pero poco protagonista, solo un «pequeño desliz» le ha jugado una mala pasada a su líder con su «Vaya gilipollas».
Y como finiquito, Rajoy ha sido un auténtico esquivador dialéctico usando el humor inteligente en sus réplicas; todos estaremos pendientes a la segunda votación que se realizará en las próximas 48 horas. Está previsto que el grupo socialista acate la decisión de la abstención de su comité federal y del profesional presidente de la gestora, D. Javier Fernández y así comenzaremos una legislatura en mayoría simple.