El Ocultismo de Rajoy

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Tras una ardua ciclogénesis explosiva repleta de relámpagos, nubarrones, lluvias y vientos huracanados, empezamos a vislumbrar cierta luz en el resultado de las estrategias llevadas a cabo por el Partido Popular en todos su niveles territoriales; locales, autonómicos y estatal.

En cuanto a una gran frase que últimamente se escucha en los medios de comunicación que dice “Mariano Rajoy es la única persona en este planeta que es capaz de avanzar estando sentado”.

Cientos de voces críticas se alzaron durante las últimas dos elecciones nacionales, pidiéndole al presidente del PP, que por favor, dejase por un momento el Marianismo acompañado de su buenismo repleto del silencio técnico/estratégico al que nos tiene acostumbrados.

Mariano Rajoy usa el silencio administrativo trasladado a la política, las personas que trabajan con él deben tener la suficiente inteligencia como para saber interpretar sus silencios, cosa que si uno no dispone de una profunda visión, puede llevar a mala interpretación.

Dicha táctica la supo usar él junto con su equipo de confianza de estrategia electoral, mientras la ciudadanía y sus adversarios fueron incapaces de atisbar un pellizquito de sus intenciones, ello provocó, el efecto “cabreo” que funciona como un triangulo isósceles con una base muy estrecha y unos lados muy verticales y cercanos, es decir, una alta volatilidad, subida de enfado muy rápida (por impotencia al no ver reacción ante un hecho/s concreto/s) y una bajada muy empinada por ver el resultado de ese silencio.

Por lo que, el presidente sabía que los nuevos grupos políticos, se aferrarían a los antiguos y obsoletos populismos, su eterno “rival” el PSOE, tenía a un líder que no uniría con su gran “NO” puesto que en la vida real, tanto NO, conlleva a rupturas, en todos los sentidos, NO abro puertas, NO quiero construir, NO quiero escuchar, NO quiero hablar, NO quiero trabajar… etc…

En definitiva, uno con un NO, solo acaba separando a las personas de su alrededor y más cuando uno lidera un partido de centro izquierda, el cual según su ideología debe estar a favor de los intereses generales y la suma en política.

En el ámbito estatal, D. Mariano, ha sabido esquivar las balas de una forma muy curiosa, no haciendo nada, todos suponíamos que los blancos fijos son los más fáciles de disparar en la diana, pero se ve que cuando estas apuntando a una diana con cientos de obstáculos de por medio, solo conseguirás desplazar el disparo a cualquier lado menos en el centro.

Así que, tras observar los resultados tan óptimos de dicha estrategia, solo podemos ver, la división del PSOE en dos facciones, radicales y moderados, por lo que la gestora liderada por Javier Fernández va a tener que ordenar al grupo socialista que se abstenga en la próxima investidura de Rajoy, no les va a quedar otra, puesto que, Pedro Sánchez ha llevado al PSOE a un callejón sin salida y aun encima han perdido la posibilidad de poder negociar con el PP, siendo unas posibles negociaciones lideradas mas por el PP que por el PSOE, ya no están en posición de “pedir” nada.

El NO a Rajoy solo llevara a unas terceras elecciones, cosa que el PP aprovechará pero no sin antes, VENDER cara a la galería que el PP de nuevo ha intentado negociar con el PSOE, porque si no lo hacen, la ciudadanía podría ver las terceras elecciones como que el PP quiere forzar esa situación, cosa que no debería hacer, porque como dice el refranero popular “mas vale pájaro en mano, que ciento volando” desde luego este tipo de estrategia política bajo mi punto de vista y según nuestro panorama actual, debería aplicarse la opción más conservadora y dirigir los esfuerzos a la posible y sensata abstención que el PSOE debe elegir.

Y como punto y final, mencionar dos pequeñas reflexiones “las presas mal heridas suelen ser devoradas por las alimañas” y “que la unión hace la fuerza”.

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